Bután

El Reino de la Felicidad en el Corazón del Himalaya

Anidado entre los majestuosos picos del Himalaya, Bután es un pequeño reino que ha sabido conservar su identidad espiritual y su conexión con la naturaleza. Conocido como “el país de la felicidad”, este destino cautiva a los viajeros por su equilibrio entre tradición y modernidad, sus impresionantes monasterios colgantes, sus valles sagrados y la calidez de su gente. Cada rincón respira serenidad y sabiduría ancestral, ofreciendo una experiencia transformadora para quienes buscan más que un simple viaje.

Explorar Bután es adentrarse en una tierra donde el bienestar espiritual prevalece sobre lo material, donde los paisajes parecen pinturas vivientes y la cultura se manifiesta en coloridos festivales, arquitectura dzong y una profunda devoción budista. Desde el icónico Monasterio del Nido del Tigre en Paro hasta los valles místicos de Bumthang y Punakha, Bután invita a desconectarse del mundo exterior y reconectarse con lo esencial: la paz interior y la armonía con la naturaleza.

Destinos Imperdibles en Bután

Thimphu

Thimphu, la capital de Bután, combina la tradición budista con un toque moderno. Es el corazón político y económico del país, pero mantiene una atmósfera tranquila, sin semáforos y con una fuerte identidad cultural. Entre sus principales atractivos están el Memorial Chorten, el Tashichho Dzong (sede del gobierno y del monje principal) y el gigantesco Buda Dordenma.

Punakha

Conocida por su clima más cálido y su exuberante valle, Punakha fue la capital del reino hasta mediados del siglo XX. Aquí se encuentra el Punakha Dzong, considerado uno de los más bellos del país, ubicado en la confluencia de los ríos Pho Chhu y Mo Chhu.

Trongsa

Ubicada en el centro del país, Trongsa es una ciudad de gran importancia histórica y espiritual. Su imponente Trongsa Dzong domina el valle y ha sido tradicionalmente el lugar desde donde los reyes butaneses gobernaban antes de ascender al trono.

Bumthang

Bumthang está formado por cuatro valles principales (Choekhor, Tang, Ura y Chhume) y es considerado el centro espiritual del país. Aquí se encuentran algunos de los templos y monasterios más antiguos y venerados, como el Jakar Dzong, el Kurjey Lhakhang y el Jambay Lhakhang.

Phobjikha

Este hermoso valle glaciar es famoso por ser el hogar invernal de las grullas de cuello negro, aves sagradas en la cultura butanesa. Rodeado de colinas boscosas, Phobjikha ofrece paisajes de ensueño, ideales para caminatas y retiros espirituales.

Haa

Uno de los valles más remotos y menos visitados, Haa conserva una autenticidad única. Su paisaje está compuesto por bosques, montañas nevadas y aldeas tradicionales. El Templo Lhakhang Karpo (Blanco) y el Lhakhang Nagpo (Negro) son dos de sus principales sitios sagrados.

Guía para Visitar Bután

Mejor Temporada para Viajar

La mejor época para visitar Bután es durante la primavera (marzo a mayo) y el otoño (septiembre a noviembre). En primavera, los valles se llenan de flores, especialmente los rododendros, y el clima es templado y agradable. En otoño, los cielos despejados ofrecen vistas espectaculares del Himalaya y coinciden con algunos de los festivales más importantes del país, como el Thimphu Tshechu y el Paro Tshechu. El invierno (diciembre a febrero) es ideal para quienes buscan tranquilidad y cielos despejados en las zonas bajas, mientras que el verano (junio a agosto) es más lluvioso, pero perfecto para disfrutar del verde intenso de los paisajes.

Móneda

La moneda oficial es el Ngultrum (BTN)

Idioma

El idioma oficial es el dzongkha, aunque muchos butaneses también hablan inglés, que se utiliza ampliamente en el turismo, la educación y los negocios. En las zonas rurales, se pueden escuchar diversos dialectos locales, lo que refleja la riqueza cultural del país.

Requisitos de Entrada para Colombianos

Para ingresar a Bután, todos los viajeros extranjeros deben obtener una visa antes del viaje, excepto los ciudadanos de India, Bangladesh y Maldivas. La visa se gestiona a través de una agencia de viajes autorizada o un operador turístico local, quienes tramitan el permiso oficial.
Además, el gobierno butanés exige la contratación de un paquete turístico oficial que incluye alojamiento, transporte, guía y alimentación, siguiendo la política de “alto valor, bajo impacto”. Desde 2022, los visitantes también deben pagar una tarifa de sostenibilidad (SDF) destinada a la conservación ambiental y el desarrollo cultural del país.